Será un edificio de 500 metros de alto y 170 kilómetros de largo donde vivirán cinco millones de personas. Sin calles, ni carreteras, ni coches.
Como si fuera extraída de una novela de ciencia ficción, Arabia Saudí ha presentado un esbozo de cómo será la ciudad futurista The Line. En su intento por alejar a la nación de la dependencia de los ingresos de las reservas de petróleo crudo, el Príncipe Heredero Mohammed bin Salman ha planificado una construcción extravagante y ambiciosa. Será una ciudad con rascacielos más altos que el Empire State Building y se extenderá en una línea recta hasta 170 kilómetros conectando la costa oeste de Arabia Saudí con el este.
La ciudad se ubicará en el desierto de Neom y contará con prácticamente todas las tecnologías futuristas que se nos puedan venir a la cabeza; desde las meramente ambiciosas (como las granjas verticales y la siembra de nubes) hasta las más fantásticas (como peleas de jaulas de robots y una luna falsa por algún motivo que desconocemos).
El último giro es un diseño recientemente revelado para The Line: una “ciudad vertical” de unos 500 metros de altura, 170 kilómetros de largo y, por alguna razón, cubierta de espejos. Así, el concepto de diseño revelados en un nuevo vídeo promocional e imágenes muestran una ciudad amurallada futurista, con el interior abierto encerrado en ambos lados por una fachada de espejos, que se extiende desde el mar Rojo hacia el este a través del desierto y hacia una cadena montañosa. Contará con un tren de alta velocidad que transportará a las personas de punta a punta en 20 minutos, mientras que todo lo demás que puedan necesitar estará a unos minutos a pie siempre.
Más detalles de la ciudad
La construcción de esta megalópolis ya ha comenzado y las proyecciones saudíes apuntan a que 1,5 millones de personas vivirán en The Line para 2030; en esta ciudad que encierra árboles, jardines y anidan comunidades entre estructuras laborales y recreativas.
“No podemos ignorar las crisis ambientales y de habitabilidad que enfrentan las ciudades de nuestro mundo, y NEOM está a la vanguardia en la entrega de soluciones nuevas e imaginativas para abordar estos problemas. NEOM está liderando un equipo de las mentes más brillantes en arquitectura, ingeniería y construcción para hacer realidad la idea de construir hacia arriba”, dijo el príncipe heredero Mohammed bin Salman en un comunicado de prensa.
La demanda de energía de la ciudad se cubrirá en un 100% con fuentes renovables, mientras que se preservará el 95 por ciento de la tierra del proyecto. Llamado Urbanismo de Gravedad Urbana, el diseño del proyecto coloca en capas verticalmente los edificios de la ciudad para que las personas puedan moverse hacia arriba, hacia abajo o de un lado a otro en lugar de viajar kilómetros mediante transportes. Por lo tanto, todo está a solo cinco minutos a pie, ya sea un parque público, un espacio de trabajo de oficina o una escuela.
Los diseñadores dicen que la estructura mantendrá un clima ideal durante todo el año, gracias a su combinación de sombra, luz solar y ventilación.
Aunque nos parezca un muro, The Line estaría compuesto de dos enormes edificios paralelos, conectados a través de pasarelas y divididos en barrios que se supone que ofrecen todas las comodidades de la vida de la ciudad.
Según los informes, la construcción de la ciudad costará 500 000 millones de dólares y Arabia Saudí parece decidido a gastarlo. Aunque la intención de hacerlo no significa que finalmente podamos verlo materializado, como ya ha ocurrido anteriormente con otros proyectos a gran escala similares, como la isla The World en Dubái.
Los críticos señalan que esos ideales utópicos tendrán un precio ambiental, ya que se crea una ciudad completamente nueva en el desierto.
The Line es solo uno de los muchos diseños ambiciosos que se llevarán a cabo en el proyecto NEOM, como una ciudad de fabricación e innovación, llamada Oxagon y el primer destino de esquí al aire libre en el Golfo Arábigo, que se ubicará en Trojena.
Fuente: Muy interesante.