
La iniciativa del otorrinolaringólogo, Leandro Guimaraes, fue reconocida internacionalmente por su impacto emocional en pacientes pediátricos con el premio “WEmbrace Awards 2025” en la categoría “historias inspiradoras”
Por Nazareno Rosen para Infobae
En Brasil, un médico otorrinolaringólogo ha revolucionado la experiencia quirúrgica de los niños al convertir el quirófano en un lugar menos intimidante. Leandro B. Guimarães, especialista en oído, nariz y garganta, ha implementado una estrategia única: vestir a sus pequeños pacientes como superhéroes antes de sus cirugías. Según informó el medio TODAY.com, esta iniciativa busca reducir el estrés y el miedo que los niños suelen experimentar en estos momentos vulnerables.
El médico, quien trabaja con pacientes pediátricos, explicó que esta idea surgió tras una experiencia particularmente conmovedora. Una niña de dos años, llamada Allana, llegó al quirófano llorando desconsoladamente. Guimarães relató que ese día se prometió no volver a llevar a un niño a cirugía en ese estado emocional. Desde entonces, ha utilizado disfraces de personajes como Batman y Flash para mejorar el estado de ánimo de los niños y hacer que se sientan valientes y poderosos.
Gracias a esta iniciativa, el médico ganó el premio “WEmbrace Awards 2025” en la categoría “historias inspiradoras”.
Un enfoque basado en el juego y la empatía
De acuerdo con TODAY.com, Guimarães considera que el juego es una herramienta poderosa para conectar con los niños. En su cuenta de Instagram, donde comparte videos de sus pacientes disfrazados, el médico escribió: “¡Siempre estaré a tu lado! Tratando de hacer este momento tenso lo más ligero posible… ¡Cuenta conmigo!”. En uno de los videos, se puede ver a los niños “volando” sobre su hombro o corriendo de la mano con él hacia el quirófano, mientras suena de fondo la canción “Stand By Me” de Ben E. King.
El médico explicó que permite a los niños elegir su disfraz favorito antes de la cirugía. Una vez que están listos, les explica que entrarán al quirófano “volando o corriendo” y que el procedimiento será parte de su misión como superhéroes. Si detecta que el niño aún tiene miedo, invita a uno de los padres a acompañarlo hasta que se administre la anestesia, lo que ayuda a que el proceso sea más tranquilo tanto para el paciente como para su familia.
Un pasado como payaso de hospital que marcó su carrera
El enfoque de Guimarães no es casual. Según detalló a TODAY.com, su experiencia como payaso de hospital durante sus años de formación médica fue clave para desarrollar estas habilidades. En ese entonces, formaba parte de un grupo que visitaba semanalmente a pacientes pediátricos en un hospital universitario, utilizando el teatro y el humor para aliviar la tensión de los niños. Estas experiencias no solo lo llevaron a enamorarse de trabajar con niños, sino que también le enseñaron a examinar a los pequeños pacientes sin asustarlos.
El médico destacó que estas habilidades adquiridas como payaso han sido fundamentales para su práctica actual. Además, señaló que los disfraces no solo benefician a los niños, sino también a sus padres, quienes se sienten más tranquilos al ver a sus hijos felices y confiados antes de la cirugía.
Un recuerdo positivo que trasciende el quirófano
Guimarães explicó que, tras la cirugía, los disfraces se entregan a los padres y los niños pueden llevárselos a casa como un recuerdo. Según consignó TODAY.com, muchos de sus pacientes regresan a las consultas de seguimiento vistiendo los mismos disfraces, mostrando con orgullo que la experiencia no fue traumática. Algunos incluso expresan su deseo de volver al hospital, recordando la cirugía como un momento lleno de juego y diversión.
El impacto de esta iniciativa también se refleja en los comentarios de los padres, quienes han compartido con el médico historias de cómo sus hijos hablan positivamente de la experiencia. Guimarães mencionó que algunos niños que necesitan cirugías de otras especialidades han pedido que él sea su cirujano, incluso si el procedimiento no está relacionado con su especialidad.
Un modelo de atención que inspira
La labor de Leandro B. Guimarães ha sido ampliamente reconocida en redes sociales, donde usuarios lo han descrito como un “ángel” y han destacado cómo su enfoque cambia la energía de un momento tan delicado. Según TODAY.com, el médico considera que su trabajo diario es un placer y que su objetivo es hacer que el quirófano sea un lugar menos estresante para los niños.
El impacto de esta iniciativa trasciende el ámbito médico, demostrando cómo la empatía y la creatividad pueden transformar una experiencia potencialmente traumática en un recuerdo positivo. Para Guimarães, cada niño que entra al quirófano vestido como un superhéroe no solo enfrenta la cirugía con valentía, sino que también le recuerda a él mismo el poder del amor y la dedicación en su profesión.
Fuente: Infobae