Un Audi A6 quedó arruinado cuando su dueño lo dejó en una playa de la Isla de Sheppey, 74 kilómetros al sureste de Londres.
Phil Ravenshear, el hombre que grabó la escena en la playa, comentó a “The Telegraph”: “Todo mirarmos con asombro como el mar se comió el auto”.
Por su parte, James Crane, rescatista de la Guardia Costera de Sheppey, dijo: “Si la gente estaciona autos cerca de la playa, deben ser más concientes de cuándo y cuánto sube la marea”.