Una de las principales cadenas abrió este sábado tras casi un año de cierre, luego de que el Gobierno nacional aprobara las medidas de prevención para prevenir potenciales contagios de COVID-19
Este sábado por la noche, por primera vez en casi un año, reabrieron en la Ciudad y la provincia de Buenos Aires los primeros cines luego de que el Gobierno nacional autorizara esta semana los lineamientos básicos del protocolo dentro del complejo y las salas.
El jueves pasado, a través de las Decisiones Administrativas 133/2021 y 145/2021 el Gobierno autorizó los protocolos sanitarios para las salas de provincia y Capital Federal, que este jueves 4 de marzo terminaran de llevar a cabo la apertura.
La cadena Showcase Cinemas fue la primera en reabrir las puertas de sus complejos de Belgrano Norte (IMAX incluido), Haedo y Quilmes este sábado, con funciones a partir de las 15 horas con menor concurrencia. Cinemark-Hoyts abrirá el próximo miércoles con entradas a mitad de precio y Multiplex el jueves.
Cinépolis, ex Village, anunció su pronta apertura a través de sus redes sociales, pero hasta ahora sin fecha confirmada, aunque el gerente comercial de la cadena, Diego Bachiller, indicó en diálogo con la agencia Télam que probablemente abrirán algunas salas este jueves.
Más allá de las cadenas multipantallas, las salas tradicionales cómo el CinemaCity General Paz, Artemultiplex Belgrano, el Cine Cosmos, Atlas Flores y las salas del Atlas Patio Bullrich, tardarán más en volver ya que deberán reacondicionar de las salas y sistemas de ventilación para la reapertura.
En esta primera etapa, la única diferencia entre los distritos estará en el aforo permitido dentro de las salas: en Provincia se arrancará con un 50%, mientras que en los cines porteños con un 30%. Sin embargo, “en ningún caso la cantidad de público podrá ser superior a 300 personas en simultáneo por sala”. El incremento de este aforo dependerá de la evolución de la pandemia en los distintos sectores del Área Metropolitana de Buenos Aires.
Por otra parte, trabajadores mayores de 60 años, trabajadoras embarazadas, e integrantes de grupos de riesgo están dispensados del deber de asistir al establecimiento de trabajo. Para el resto de los empleados, se les deberá otorgar elementos de prevención, protección, limpieza y seguridad. Y antes de ingresar a sus puestos se les tomará la temperatura corporal.
Dentro de las salas, el uso del barbijo será obligatorio: las personas solo podrán quitárselo para ingerir alimentos o bebidas, y deberán volver a colocárselo después. Además, antes y después de cada función, las salas serán higienizadas y sanitizadas. En el caso de uso de lentes 3D, serán limpiados y desinfectados por el personal de los cines después de cada uso.
Para prevenir contagios, el Gobierno estableció dentro de cada una de las salas de cine la ocupación de “burbujas sociales de recreación”: espacios compartidos de proximidad entre personas que concurren juntas al establecimiento, que no deben integrar otra burbuja durante la realización del mismo evento y estarán conformadas por un máximo de seis personas en butacas contiguas. De esta forma se permite “compartir un mismo espacio en un ambiente controlado”, dado que “se mantiene la distancia entre grupos de personas no vinculadas”.
La distancia entre butacas ocupadas deberá ser, como mínimo, de 1,5 metros a 2 metros, o de al menos dos butacas libres a los lados de cada burbuja. También deberán estar libreas las butacas que se encuentren inmediatamente adelante e inmediatamente detrás de cada butaca ocupada. Este punto del protocolo, no obstante, podrá variar de acuerdo a la evolución de los contagios.
En cuanto a los horarios de las funciones, cada complejo deberá establecer un cronograma, en función de su programación e instalaciones preexistentes, que minimice la congestión de público asistente al ingreso y egreso de las funciones y contemple lapsos de tiempo suficientes para que el personal pueda llevar a cabo la adecuada limpieza y desinfección entre funciones.
También se incentivará el uso de medios digitales para la compra y pago de las entradas y productos comestibles a fin de minimizar la manipulación de dinero.
“En aquellos casos donde sea posible en función de las características arquitectónicas, y a fin de complementar y optimizar la ventilación de las salas, las puertas de las mismas (tanto de ingreso como de salida de emergencia) se mantendrán abiertas durante al menos 10 minutos entre función y función”, estableció la resolución publicada esta semana en el Boletín Oficial.
En caso que no exista esa posibilidad, se deberán realizar renovaciones por medio de inyección y extracción de aire forzada y/o complementar renovaciones con recirculaciones de aire por medio de sistema de filtrado según las pautas definidas por cada autoridad jurisdiccional. También se instalarán dispensadores de alcohol en gel dentro de los establecimientos.
De acuerdo con las estimaciones del sector, antes de la pandemia funcionaban en el país unas 800 salas de cine en total, la gran mayoría concentradas en la ciudad de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires. Con todo, según estimaciones de una de la Federación Argentina de Exhibidores Cinematográficos (Fadec), que agrupa a los cines independientes, un 25% de sus integrantes se desasociaron en los últimos meses como consecuencia de permanecer tantos meses cerrados.
La cartelera, por otra parte, ya está lista con varios estrenos y “tanques” cinematográficos que están próximos a estrenarse en las semanas siguientes. Entre ellas, “Tenet”, del director Christopher Nolan; “The Witches”, de Robert Zemeckis; una nueva versión del clásico “Tom y Jerry”; “Wonder Woman 1984”; y las argentinas “Hoy se arregla el mundo”, con Leonardo Sbaraglia, y “La noche mágica”, con Natalia Oreiro y Diego Peretti.+
Fuente: Infobae
