Se han puesto a pensar que pasaría si a un niño de dos años le dieran de comer en diferentes horarios y mandarlo a dormir a diferentes horas? Sería un desastre, ¿no? Consideremos el dato de que un perro alcanza la inteligencia de un niño de 2 años al cumplir la edad adulta. Tan importante es tener a tu perro con una rutina y un horario específico, como a cualquier niño.
Caminata de perro
Mantener un orden y una estructura diaria a tu perro, puede significar un mejor comportamiento y obediencia de tu mascota, ayudándolo a aumentar su grado de inteligencia. Así sabrá distinguir el momento adecuado para salir a caminar, jugar, dormir, comer o simplemente hacerte compañía.
Hay varias formas de establecer una rutina para tu perro, como:
1.- Sácalo a caminar todos los días a un mismo horario y una ruta, preferentemente en la mañana. Un perro, cuando sale a caminar, saca todas sus energías, respira otro aire y su mundo no se ve limitado a su hogar.
2.- Dale de comer en un horario y lugar específico. Es recomendado que se alimente de 2 a 3 veces por día. También es importante que no tenga comida abierta todo el día, es decir, que no tenga alcance de comer las 24 horas del día. Lo recomendado es darles de comer 10-15 minutos en la mañana y 10-15 minutos en la tarde/noche.
3.- Tener un lugar específico donde guardar sus accesorios. Tu mascota es lo suficientemente inteligente para aprender a distinguir cuando es momento de jugar, o salir a pasear dependiendo de cuando uno agarra su correa o su juguete. Esto sirve para que tu perro no te exija cuando no es momento.
Recordemos que tu amigo es una excelente compañía. Pero esta compañía puede resultarnos un caos si no logramos educarlo con una estructura. Si logramos lo deseado, podemos sacarle el máximo provecho a nuestro perro.
¡Un perro agradece los limites!
Suena fácil pero requiere de tiempo, dedicación y quizás de mucha paciencia. Pero él te lo va a agradecer y el resultado será una relación más sana y equilibrada con tu mascota.