Otro de los grandes protagonistas, en este caso ciertamente inesperado, de la última edición de la feria MWC, ha sido Sony, que ha llevado a cabo una reorganización de sus distintas gamas de smartphones Xperia E, M y Z que serán sustituidas por los nuevos Xperia X, Xperia XA y Xperia X Performance. Los tres terminales tienen 5 pulgadas de pantalla, aunque las configuraciones son evidentemente distintas y saldrán al mercado con Android 6 Marshmallow. Se espera que los nuevos terminales lleguen en junio y, de momento, Sony no ha desvelado precios.
Personalización, acceso más inteligente y natural a la información y servicios que vayan “más allá de lo que un teléfono inteligente es capaz de hacer” es lo que busca Sony con su incursión en la vida conectada, según el responsable del negocio móvil, Hiroki Totoki.
Su propuesta del internet de las cosas para el MWC se vertebra en cuatro dispositivos: un auricular inalámbrico (Smart Ear), una cámara ultracompacta con lente esférica (Xperia Eye), un proyector (Xperia Project) y un asistente personal (Xperia Agent).
“Es la gran apuesta de futuro de Sony. Quiere asumir el liderazgo en el internet de las cosas”, explicaron fuentes de la tecnológica japonesa.