Ciencia – Internacional
Este grupo selecto también podría saborear un cuadro, según un estudio. La sinestesia, cuyas causas son poco conocidas por la ciencia, puede manifestarse con diferente intensidad, estar más extendida entre la población y trascender el cuadro clínico
Según una nueva investigación, esta parte de la población podría padecer una forma ligera de sinestesia, es decir, que tendría la capacidad de oír colores, ver sonidos o saborear un objeto con sólo tocarlo.
Hasta ahora se ha pensado que entre el 2 % y el 5 % de la población humana tendría estas capacidades extrañas, pero esta nueva investigación sugiere que la sinestesia puede ofrecer distintos grados de manifestación y afectar a un mayor número de personas.
Según publica tendencias21.net, algunas investigaciones sostienen que la sinestesia se debe a una activación cruzada de áreas adyacentes del cerebro que procesan diferentes informaciones sensoriales.
El cruce de informaciones sensoriales dentro del cerebro podría producirse, hipotéticamente, por un error en las conexiones nerviosas que se produciría en los momentos de desarrollo del feto.
La sinestesia puede manifestarse también cuando uno de los sentidos está dañado, por efecto de drogas o en casos de autismo.
La sinestesia no obstante no es bien conocida todavía por la ciencia, que necesita nuevas investigaciones para conocerla mejor y evaluar su verdadera dimensión social. También se piensa que puede tener un origen genético, ya que sus manifestaciones se concentran en las mujeres y en determinadas familias.
Asimismo, hay que tener en cuenta sus diferentes variables, ya que si por una parte sus efectos más espectaculares son escasos, como por ejemplo percibir una sensación dulce en la boca cuando se contempla una obra de arte, otras manifestaciones de la sinestesia son más frecuentes, por ejemplo las que mezclan la visión y los sonidos.
Nueva investigación
Para ampliar los conocimientos sobre la sinestesia, investigadores británicos han intentado determinar si los casos de personas sinestésicas que oyen sonidos cuando ven la luz son más frecuentes que otros tipos de sinestesia.
Los resultados de su investigación, que se publican en la revista Counsciousness and Cognition, sugieren que una quinta parte de la población podría padecer una forma leve de sinestesia.
Este sorprendente resultado se obtuvo mediante una investigación en la que participaron unos cuarenta voluntarios que fueron expuestos a la percepción de sonidos y de luces. Ninguno de los voluntarios tenía antecedentes de sinestesia.
Los investigadores descubrieron que el 22 % de los voluntarios oían sonidos cuando veían luces, cuando en realidad no se había producido ningún sonido durante el experimento.
Profundizando en esta experiencia, en una segunda fase del experimento los investigadores introdujeron sonidos al mismo tiempo que generaban destellos luminosos.
El resultado fue entonces más sorprendente, ya que el mismo 22 % de voluntarios fueron incapaces de concentrarse en el sonido del experimento coincidente con los destellos de luz.
No podían concentrarse en ese sonido porque en realidad estaban percibiendo dos sonidos, el que se producía dentro del experimento, y el que ellos percibían al percibir la luz, y que sólo existía en su imaginación.
Fuente: (rosario 3/ En Hora Buena)